Redacción

El autoritarismo de la derecha recorre la Costa del Sol: Ahora le toca a Fuengirola

Destacado

Estepona donde el alcalde García Urbano, para tapar sus problemas judiciales, impide razonar y argumentar las propuestas a la portavoz socialista quitándole la palabra en los plenos. Benalmádena, con un alcalde condenado en seis ocasiones por negar información al grupo socialista- y las que quedan por venir. Benahavís, cuyo ayuntamiento dirigido por José Antonio Mena, ha recibido la tercera condena por vulnerar los derechos fundamentales de la oposición y de una concejala socialista. En Mijas, policías locales y bomberos tienen que aguantar que la alcaldesa, Ana Mata, les compare con “perros y gallinas e ignorantes” solo por ejercer pacíficamente su derecho a protestar. Ángeles Muñoz en Marbella, junto a Vox, desoye la propuesta de la oposición e impide homenajear a una víctima nonagenaria de La Desbandá residente en San Pedro Alcántara. Y, ahora, le toca a Fuengirola, donde la alcaldesa, Ana Mula, alumna aventajada de las formas heredadas de Esperanza Oña, impide debatir en el pleno un tema tan sensible e importante como es la urgencia sanitaria en la localidad.

Un fantasma autoritario recorre España y el planeta, pero en los Ayuntamientos de la Costa del Sol, gobernados por el Partido Popular, tiene un microcosmos como fiel exponente. Derechona, trumpismo y formas propias de los dictadores que hacen de los ayuntamientos sus cortijos particulares.

Es el caso acontecido en el Consistorio de Fuengirola, feudo casi histórico del PP y que ha denunciado el PSOE local. Se trata del veto a su intervención para explicar la urgencia de una moción sobre el cierre de los centros de salud en horario de tarde este verano.

En el pleno ordinario celebrado este miércoles en Fuengirola, el Grupo Municipal Socialista ha denunciado un nuevo atropello al reglamento por parte de la alcaldesa y presidenta del pleno, Ana Mula, que impidió a la portavoz del PSOE, Carmen Segura, exponer los motivos de urgencia de una moción que alertaba sobre la crítica situación sanitaria que vivirá el municipio este estío.

La moción, presentada por la vía de urgencia, tenía como objetivo instar a la Junta de Andalucía a que rectifique su decisión de reducir contrataciones sanitarias estivales y evite el cierre vespertino de centros de salud, “una medida que impactará especialmente en municipios turísticos como Fuengirola, donde la población se multiplica durante los meses de verano”, ha explicado Segura.

Contraviene la norma aprobada
Según el artículo 54.1 del Reglamento Orgánico de Funcionamiento del Pleno (ROFP), todos los grupos tienen derecho a intervenir brevemente para justificar la urgencia de sus mociones antes de que esta sea sometida a votación. “Sin embargo, la alcaldesa obvió este trámite, privando al PSOE de su derecho a la palabra y vulnerando el procedimiento establecido”, ha criticado.

La urgencia de la moción se sustentaba, entre otros argumentos, en el inminente inicio de la temporada alta, la sobrecarga ya existente en las urgencias del centro de salud de Las Lagunas y el perjuicio directo que supondrá para residentes y visitantes no poder acceder a atención médica en horario de tarde.

Pero Vox y PP sí tiene derecho
“Resulta especialmente llamativo que en el mismo pleno se debatieron dos mociones casi idénticas sobre seguridad ciudadana presentadas por PP y Vox, mientras se negaba siquiera la posibilidad de abordar una problemática sanitaria de primer orden”, ha señalado la portavoz.

Desde el PSOE han denunciado que este tipo de maniobras demuestran que, en Fuengirola, a la derecha no le interesa hablar de sanidad pública, ni tampoco escuchar las preocupaciones reales de la ciudadanía. “El silencio no resuelve los problemas sanitarios. Lo que está en juego es la salud de miles de personas que viven o visitan Fuengirola, y no vamos a dejar de exigir respuestas”, han concluido los socialistas.

 

×