El retorno del Tívoli
Los que tenemos memorietas hemos disfrutado en el Parque de Atracciones de Benalmádena, el oasis canoro de los finales del franquismo: durante cerca de 50 años, sus espectáculos, los cacharritos y el hot dog, antes de meternos mis amigos Julio y el Sebastín en su discoteca vacía, a darle el cierre a nuestras correrías de la noche de la Costa del Sol, eran nuestra gran musa de variedades y diversión