El portavoz socialista en Mijas, Roy Pérez, ha encendido todas las alarmas con una denuncia que, de confirmarse, dejaría al Ayuntamiento en el centro de un nuevo escándalo económico. Según explicó en el pleno municipal, el Consistorio habría abonado 16.819 euros por un lote de apenas 400 fotografías digitales, una cifra que sitúa cada disparo de cámara en 42 euros. “Un clic, 42; clic, 42; clic, 42… así hasta 400 veces”, ironizó Pérez, visiblemente indignado.
El caso roza el límite del contrato menor y, para el PSOE, huele a sobrecoste injustificable. Pérez incluso comparó el precio con el de un reportaje profesional de boda, “tres o cuatro días de trabajo”, cuyo coste —recordó— suele oscilar entre 2.000 y 7.000 euros, muy lejos de los casi 17.000 euros que, asegura, ha desembolsado el Ayuntamiento solo por una sesión fotográfica institucional.
La pregunta lanzada por el socialista resonó como un disparo en el salón de plenos:
“¿No había nadie en Mijas capaz de hacer tic, tic, tic por 42 euros la foto? ¿Por qué contratar a alguien de fuera?”
La respuesta del concejal de Vox, Francisco Jerez, no hizo sino avivar la polémica. Con un desconcertante tono de indiferencia, afirmó:
“Sea de donde sea… Yo no entiendo de fotografía ni sé lo que cuesta una fotografía.” La oposición interpreta esa frase como la prueba de una gestión despreocupada y poco rigurosa.
En conclusión: un simple “clic” podría convertirse en el sonido del próximo escándalo de la política mijeña.


